Tendencias del empleo, 2010-2023
Las principales tendencias del empleo desde 2010
Desde 2010, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) utiliza una encuesta nacional de empleo (NENE) con una metodología actualizada, que más en el presente incorpora los parámetros de referencia del Censo de 2017. Sus resultados muestran que las personas ocupadas en Chile pasaron de 7,34 millones en el año 2010 a 9,07 millones en 2023. Los ocupados son definidos, en este caso de manera bastante amplia, como aquellas personas que han trabajado al menos una hora durante la semana de referencia de la encuesta y han recibido o recibirán un pago en dinero o en especie por ese trabajo. La Organización lnternacional del Trabajo define el empleo como "trabajo a cambio de pago", sin importar la relación de dependencia asalariada o de independiencia por autoempleo.
La ocupación medida por el INE creció en 2011-2019 al 1,6% anual promedio y en un 1,4% en 2020-2023. La elasticidad empleo-producto fue de 0,5 en el primer período y de 0,7 en el segundo. En 20 países de la OCDE esta elasticidad fue de 0,8 promedio en 1960-2014, por lo que la intensidad en empleo del crecimiento desde 2010 en Chile ha sido comparativamente baja.
En la crisis pandémica, la pérdida de empleos fue muy superior a la de la producción, sobre todo en el empleo por cuenta propia. Recién en 2023 la ocupación total superó a la de 2019, aunque la producción es superior a la de la pandemia desde 2021 (en 7% en 2023). Esto ha implicado un aumento de la productividad agregada del trabajo. La recuperación total del empleo posterior a la crisis pandémica ha sido lenta, salvo en el caso del empleo asalariado formal al iniciarse la reactivación. Luego este se estancó y, en cambio, se dinamizó la creación de empleo informal.
Fuerza de trabajo y ocupación, 2010-2023, miles de personas y porcentajes
Por su parte, las personas inactivas sumaron en 2023 unos 6,3 millones, a comparar con 5,7 millones en 2019. Habían alcanzado 7 millones en junio de 2020, en el peor momento de la crisis sanitaria por el Covid-19.
Persiste el retraso en la recuperación de la tasa de ocupación
El crecimiento y la recuperación del empleo desde la segunda parte de 2020 no han sido suficientes, sin embargo, para volver a una tasa de ocupación de la población en edad de trabajar (15 años y más) al menos equivalente al nivel previo a la crisis de la pandemia de Covid-19. El desafío para la economía chilena es aumentar la actividad y el empleo para seguir restableciendo y superando esa tasa de ocupación, que alcanzó solo a un 56,6% en el cuarto trimestre de 2023, a comparar con el 58,6% en el mismo trimestre de 2019. Un hecho a destacar es que la tasa de ocupación de la mujer está próxima a recuperarse respecto a los niveles pre-pandemia, pues alcanzó un 48,0% en el último trimestre del año, a comparar con un 48,6% hace cuatro años.
Un aumento de la tasa de desocupación
La tasa de desempleo ajustada estacionalmente se situó en el cuarto trimestre en un 8,9% de la fuerza de trabajo (ver el gráfico), registro que es un 0,1 punto porcentual inferior al del trimestre móvil anterior, pero superior al 8,6% del primer trimestre.
La fuerza de trabajo ha crecido en 2023 a un ritmo superior al de la ocupación (denominador y numerador de la tasa de desocupación de la fuerza de trabajo, respectivamente). Se mantuvo la búsqueda de actividades remuneradas por personas antes económicamente inactivas, lo que es un hecho positivo pero que impidió bajar la tasa de desempleo (ver el gráfico). Esto explica que esa tasa -sin corrección estacional- alcanzara en el cuarto trimestre de 2023 un 8,5% de la fuerza de trabajo, cifra que es un 0,6 punto porcentual superior a la de hace un año, cuando la tasa registró un 7,9%. Antes de la crisis de la pandemia, había marcado un 7,1% de la fuerza de trabajo en el cuarto trimestre de 2019 y hace una década un 5,8% de la fuerza de trabajo en el cuarto trimestre. La diferencia de 2,7 puntos porcentuales respecto a 2013 es significativa.
Un aumento de los asalariados en el empleo total
En la distribución del empleo por categorías se produjo un aumento de los asalariados en la etapa post-pandemia, cuya participación en el total de ocupados pasó de 70,4% en 2010 a 70,6% en 2019 y a 73,1% en 2023. Se mantuvo estable el empleo por cuenta propia, sumando un 20,7% del total, mientras se constató una disminución de los empleadores (desde un 4,5% de las ocupaciones en 2010 a 4,1%% en 2019 y a solo 3,2% en 2023) y también del empleo doméstico y de los familiares no remunerados. En la economía chilena de inicios del siglo XXI prevalece la relación laboral salarial, lo que se reforzó entre 2019 y 2023.
Ocupación por categorías
Un aumento del empleo en las ramas de servicios
En la distribución del empleo por ramas se mantuvo la tendencia a la pérdida de la participación relativa del empleo en la producción de bienes en beneficio de la provisión de servicios (ver https://mgpp-usach.blogspot.com/.../una-nota-sobre-la...). Se sigue reforzando así el predominio de los servicios en la producción y el empleo, aunque no es el caso en la canasta exportadora, en la que domina la minería. En efecto, los puestos de trabajo en la producción de bienes pasaron de 2,658 millones en 2019 a 2,547 millones en 2023, aunque se verificaron aumentos en la minería y el suministro de electricidad, gas y agua y algo en la industria. Esto contrastó con una fuerte caída en la agricultura y la construcción. El resultado es que los empleos en la producción de bienes alcanzaron un 28,1% del total en vez del 29,8% de 2019.
Las fuentes de empleo más importantes en estas ramas de la economía siguen siendo la industria manufacturera (889 mil empleos, un 9,8% del total), que ganó 9 mil puestos de trabajo en 2019-2023, un 1,0% adicional; la construcción (722 mil empleos, un 8,0% del total), que perdió la considerable cantidad de 130 mil empleos, con una caída de -6,4%, y la agricultura (545 mil empleos, un 6,0% del total), que sufrió una merma todavía mayor, de -153 mil puestos de trabajo y una caída de -20,1% respecto a 2019. En contraste, la minería pasó de 216 mil personas ocupadas a 277 mil en el mismo período, con un aumento de 40 mil empleos (un 16,9% adicional, llegando a un 3,1% del empleo total), a pesar de la caída de la producción, lo que refleja una disminución de la productividad promedio del sector por la menor ley del mineral y mayores dificultades de extracción. El suministro de electricidad, gas y agua y la gestión de desechos, sumaron, por su parte, un 1,3% del empleo total, el que aumentó en 13,9% con la creación de 13 mil nuevos empleos en 2019-2023.
Por su parte, los puestos de trabajo en los servicios a las personas y a la producción pasaron de 6,295 millones en 2019 a 6,496 millones en 2023, aunque con ramas que se expanden y otras que se contraen. Estos empleos alcanzaron un 71,6% del total de la ocupación, mientras en 2019 representaban el 70,2%.
La fuente de empleo más importante en los servicios es, por lejos, el comercio, con 1,738 millón de puestos de trabajo y un 19,2% del empleo total, en el que se concentra buena parte del sector informal y por cuenta propia. Sin embargo, ganó solo 16 mil empleos desde 2019. Luego viene la enseñanza (759 mil empleos y un 8,4% del total), actividad que perdió 37 mil empleos en el mismo lapso, reflejando la evolución demográfica en el sistema escolar. En cambio, la salud (669 mil empleos y un 7,5% del total) ganó nada menos que 130 mil puestos de trabajo: la pandemia pasó por ahí y con ella también la evolución demográfica, que aumenta año a año el peso de las personas de mayor edad en la población, las que necesitan proporcionalmente más atención médica, y disminuye el de los más jóvenes por el efecto de la caída de la natalidad. El transporte (575 mil empleos y un 6,3% del total) experimentó un leve aumento de su dotación, con 2,5 mil empleos más, un 0,4% adicional. Las actividades de alojamiento y comidas (410 mil empleos, un 4,5% del total) perdieron, en cambio, 33 mil ocupaciones, una caída de -7,5%, que refleja el cierre de muchas pymes del sector durante la pandemia.
La administración pública pasó de 476 mil empleos a 538 mil (un 5,9% del total), con un aumento de 31 mil puestos de trabajo desde 2019, nada demasiado extraordinario. Esta expansión es menor que la de los servicios administrativos y de apoyo, cuyos empleos aumentaron en 53 mil (sumaron 284 mil, un 3,1% del total) y que la de la rama de la información y comunicaciones, que aumentó los empleos en 34 mil (sumó 192 mil, un 2,1% del total). También se expandieron las ocupaciones en la rama de actividades profesionales, científicas y técnicas (sumaron 337 mil, un 3,7% del total), con 11,2 mil empleos nuevos desde 2019, y las de la rama de actividades financieras y de seguros (sumaron 191 mil, un 2,1% del total), con 13,2 mil empleos nuevos.
La rama de actividades inmobiliarias se expandió (sus empleos sumaron 91 mil, un 1,0% del total) con 8,8 mil puestos de trabajo nuevos. En cambio, los puestos de trabajo en los hogares como empleadores, es decir en el servicio doméstico (268 mil, un 2,9% del total), cayeron, en cambio, en 89 mil empleos. Esto también ocurrió en la actividad artística y de entretenimiento (119 mil empleos, un 1,2% del total), que perdió 19 mil puestos de trabajo, con secuelas aún no recuperadas de la pandemia.
Ocupación por ramas
Un aumento de la ocupación en funciones directivas y profesionales y una caída del trabajo no calificado
La encuesta del INE también clasifica los empleos por "grupos de ocupación". Es notorio el aumento del empleo en los grupos de profesionales altos y medios, que pasaron de 1,57 millones en 2010 a 2,32 millones en 2019 y a 2,64 millones de personas en 2023. Se trata de un salto de la participación en el total de ocupados desde el 21,4% hace tres lustros a un 25,9% antes de la pandemia y finalmente a un 29,1% en la actualidad.
En contraste, se produjo una caída de los trabajadores no calificados y los empleados de oficina, que pasaron en conjunto de 2,46 millones en 2010 a 2,28 millones en 2019 y a 2,04 millones en 2023, respectivamente un 33,6%, un 25,4% y solo un 22,5% del total de ocupados. Mientras, los trabajadores manuales calificados sumaron en conjunto 1,67 millones en 2010, 1,82 millones en 2019 y también 1,82 millones en 2023, respectivamente un 22,8%, un 20,3% y un 20,1% del total de la ocupación en 2023.
Estos son los tres segmentos cuantitativos principales en la clasificación de la ocupación por grupos socioeconómicos, cuya evolución refleja que la fuerza de trabajo en promedio es hoy más calificada que hace una década.
Un análisis más detallado por grupo muestra que en el vértice de la ocupación de mayor jerarquía económica y de ingresos, se produjo una importante expansión de los miembros del poder ejecutivo, cuerpos legislativos y personal directivo de la administración pública y empresas (182 mil en 2010 y 405 mil en 2023, grupo que pasó de un 2,5% a un 4,5% del total), siendo los directivos de empresas los más numerosos y mejor remunerados (ver el cuadro más abajo y más detalles en https://mgpp-usach.blogspot.com/.../una-breve...). Entre el resto de los ocupados en tareas de mayor calificación, se constató una fuerte expansión del grupo de los profesionales y científicos (765 mil en 2010 y 1,57 millón en 2023, alcanzando un 10,4% y un 16,8% del total respectivamente) y el de los técnicos y profesionales de nivel medio (802 mil en 2010 y 1,13 millón en 2023, un 10,9% y un 12,3% del total respectivamente). En cambio, se registró una caída de los agricultores y trabajadores calificados agropecuarios y pesqueros (256 mil en 2010 y 201 mil en 2023, un 2,2% del total).
En el segmento de los ocupados de menos calificación, que representa una proporción ampliamente mayoritaria del total, aunque levemente decreciente (67% del empleo en 2010 y un 64% en 2023), el grupo que destacó en su expansión fue el de los trabajadores de los servicios y vendedores (1,13 millón en 2010 y 1,93 millón en 2023, un 15,5% y un 21,3% del empleo total respectivamente). También se incrementaron, pero en mucho menor medida, los grupos de trabajadores manuales calificados de los operarios y artesanos (1,04 millón en 2010 y 1,10 millón en 2023, un 14,2% y un 12,2% del empleo total respectivamente) y de los operadores de instalaciones y máquinas (636 mil en 2010 y 720 mil en 2023, un 8,7% y un 7,9% del empleo total respectivamente). En cambio, declinó el grupo de los trabajadores no calificados (1,85 millón en 2010 y 1,56 millón en 2023, un 24,4% y un 17,2% del empleo total respectivamente) y el de los empleados de oficina (676 mil en 2010 y 476 mil en 2023, un 9,2% y un 5,2% del empleo total respectivamente).
Grupos de ocupación
Autor responsable: Gonzalo D. Martner.